Hoy traemos este artículo en el que vas a descubrir cómo limpiar un suelo antideslizante para mantener sus cualidades y hacer que tu inversión tenga mayor tiempo de vida útil, todo bajo la guía de especialistas en pavimentos y revestimientos.
Los suelos antideslizantes son una solución ideal para mejorar la seguridad y el confort de los espacios, tanto interiores como exteriores, son una alternativa casi indispensable en algunos casos.
Hablando un poco más sobre los suelos antideslizantes, estos suelen tener una superficie rugosa o con relieves que aumenta la fricción y evita los resbalones y las caídas. Además, son resistentes al desgaste, al agua, al fuego y a los productos químicos, lo que los hace aptos para distintos usos y sectores.
Sin embargo, los suelos antideslizantes también requieren de una limpieza y un mantenimiento adecuados para conservar sus propiedades y su aspecto.
Debido a su textura, estos suelos tienden a acumular más suciedad y polvo que los suelos lisos, lo que puede afectar a su higiene y a su efecto antideslizante. Por eso, es importante seguir unas pautas y consejos para limpiarlos correctamente y evitar dañarlos.
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Tips para limpiar suelos antideslizantes
En este texto, vamos a explicar cómo limpiar un suelo antideslizante de distintos materiales, como vinilo, caucho, cerámica o piedra. También vamos a recomendar algunos productos y herramientas que facilitan la limpieza y el cuidado de este tipo de superficies:
Aspirar con frecuencia
La primera recomendación es aspirar el suelo con frecuencia, al menos una vez al día, para eliminar el polvo y la arena que puedan rayar el material o dificultar la limpieza posterior.
También se puede usar una escoba o una mopa de microfibra, pero la aspiradora es más efectiva para llegar a los rincones y las juntas.
Jabon pH neutro y agua tibia
Por otro lado, te recomendamos usar un jabón con pH neutro y agua tibia para fregar el suelo con una fregona bien escurrida. El jabón con pH neutro es el más adecuado para este tipo de suelos, ya que no los daña ni altera su color.
Además, se debe evitar encharcar el suelo o dejarlo húmedo durante mucho tiempo, ya que el agua puede filtrarse entre las juntas y causar malos olores o despegar el pavimento.
Tratar especialmente las manchas
Otro tip muy importante es tratar las manchas de grasa con una mezcla de alcohol y jabón de lavavajillas. Esta solución es eficaz para disolver la grasa y dejar el suelo limpio y brillante.
Se debe aplicar con un paño o una esponja y frotar suavemente sobre la mancha hasta que desaparezca. Luego se debe aclarar con agua y secar bien el suelo.
Para las manchas más difíciles…
Un truco bajo la manga es usar lejía diluida en agua caliente o una mezcla de vinagre blanco, alcohol y agua para eliminar las manchas más difíciles o persistentes, como las de óxido, pintura, tinta o moho.
Estos productos tienen un poder desinfectante y blanqueador que ayuda a eliminar las manchas sin dañar el suelo. Se debe aplicar con un pulverizador o un paño sobre la zona afectada y dejar actuar unos minutos.
Evita ser agresivo con tu suelo
Finalmente, cerramos con esta última recomendación, evita el uso de productos abrasivos o corrosivos, como disolventes, lejía pura, agua fuerte o acetona, ya que pueden deteriorar el material, quitarle el brillo o cambiarle el color.
También se debe evitar arrastrar muebles u objetos pesados sobre el suelo, puesto que pueden rayarlo o deformarlo.
Siguiendo estas recomendaciones podrás limpiar tu suelo antideslizante de forma fácil y eficaz, manteniendo su aspecto y sus propiedades durante mucho tiempo. Recuerda que un suelo limpio y cuidado es más seguro y confortable para ti y tu familia.
Herramientas y productos para limpiar suelos antideslizantes
Ahora que ya como limpiar un suelo antideslizante y conservarlo en buen estado, limpios y agradables tus suelos antideslizantes, vamos a compartir una lista de herramientas y productos que ya leíste y que ahora vas a necesitar tener en casa para tus jornadas de limpieza:
Una aspiradora
Es el mejor aliado para eliminar el polvo y demás partículas de suciedad que puedan dañar el material o dificultar su correcta limpieza.
La aspiradora es más efectiva que la escoba o la mopa para llegar a los rincones y las juntas, haciendo más fácil una tarea que como ya leíste, es recomendable realizar al menos una vez al día.
Un jabón con pH neutro
Ya que este no suele ser un producto muy común en los hogares, aprovechamos para hacer énfasis en él porque, es lo más adecuado para limpiar un suelo antideslizante, pues no los daña ni altera su color.
Se debe diluir una pequeña cantidad de jabón en agua y proceder a limpiar el suelo antideslizante con una fregona.
Un paño o una esponja
Estas herramientas te van a ser útiles para tratar casos puntuales como manchas de grasa, óxidos, derrames de tintas o sustancias similares que hagan necesario un tratamiento especial.
Una fregona y un cubo
Este dúo dinámico es imprescindible para limpiar el suelo con agua y jabón. Se debe usar una fregona bien escurrida y un cubo con agua tibia, recuerda cambiar el agua cada vez que se ensucie, para evitar dejar marcas o restos de suciedad en el suelo.
Un pulverizador o un trapo
Con estas herramientas vas a poder aplicar lejía diluida en agua caliente o una mezcla de vinagre blanco, alcohol y agua, en los casos que mencionamos donde las manchas más sean persistentes y difíciles de sacar luego de haber aplicado el jabón neutro.
Además, estos productos tienen un poder desinfectante y blanqueador que ayuda a eliminar las manchas sin dañar el suelo. Se debe aplicar con un pulverizador o un trapo sobre la zona afectada y dejar actuar unos minutos.
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